6 minutos de lectura 22 ene. 2020
Huellas en el paisaje de invierno

Cuatro acciones que los líderes empresariales pueden realizar ahora para crear valor a largo plazo

Por Carmine Di Sibio

EY Global Chairman and CEO

Apasionado por nuestros clientes y el poder de nuestra organización global. Facilitador del crecimiento y la innovación. Constructor de relaciones. Fanático de los deportes.

6 minutos de lectura 22 ene. 2020
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Es hora de pasar de la ambición a la acción – y a la responsabilidad.

El debate sobre el papel de las empresas en la sociedad no es nuevo. Sin embargo, la discusión ha adquirido recientemente un mayor sentido de importancia: en agosto pasado, más de 180 CEOs de Business Roundtable abandonaron públicamente el principio de la primacía del accionista en favor de la opinión de que las empresas tienen una obligación con un conjunto más amplio de stakeholders. Esta declaración pública envió una señal concreta de que los líderes empresariales establecidos han llegado a un punto de inflexión.

Es una buena noticia que cada vez más empresas reconozcan la necesidad de ampliar su enfoque y considerar más de cerca a su gente, comunidades y clientes. Pero sabemos que esto no puede quedarse solo en una ambición. Aquí hay cuatro cosas que los líderes empresariales pueden hacer ahora mismo para pasar de la ambición a la acción, ya que se trata de la creación de valor a largo plazo:

1. Involucrar a la gente

Como líderes empresariales, sabemos que uno de nuestros stakeholders más importantes es nuestra gente. Como uno de nuestros mayores activos e inversiones más importantes, no podemos crear valor a largo plazo sin una comunidad de empleados comprometidos. No importa lo que se haga, el éxito de cualquier estrategia depende de las personas que la llevan a cabo. Por lo tanto, los líderes deben actuar para empoderar a su fuerza laboral y equiparla con las herramientas que necesita para tener éxito, ahora y a largo plazo.

Esto significa reconocer que la forma en que pensamos sobre la trayectoria profesional de un individuo debe cambiar. El rápido ritmo de la tecnología hace que se demanden constantemente nuevas habilidades. La preparación de la carrera ya no es un momento único en el tiempo o una serie de pasos estandarizados. En cambio, la gente necesita reevaluar y reimaginar continuamente sus roles, solo para mantenerse al día con el ritmo del cambio.

Las organizaciones juegan un papel vital en ayudar a sus trabajadores a tener éxito en este mundo tan disrumpido por la tecnología a través de programas de reentrenamiento y otras experiencias similares. Es en parte por eso que los inversores, los reguladores y la comunidad empresarial están viendo el despliegue de personas, habilidades y capacidades como un activo estratégico, con métricas como el costo de la fuerza laboral, la diversidad, la atracción, la rotación, la formación y el compromiso como elementos fundamentales del crecimiento financiero sostenible y a largo plazo.

2. Medir y reportar el valor a largo plazo

Todas estas iniciativas entienden una cosa: que para inculcar un enfoque a largo plazo, centrado en las partes interesadas, debemos dejar atrás la práctica anticuada de medir el valor mirando únicamente el rendimiento financiero a corto plazo.

Los resultados trimestrales ya no son un reflejo exacto del valor a largo plazo de una empresa en un mundo en el que el talento, la innovación y el impacto social contribuyen en última instancia al éxito financiero. Hoy en día, necesitamos medir los activos intangibles – como el capital humano, la innovación y nuestro impacto en la sociedad – y luego vincular esos activos a nuestros objetivos orientados a un propósito.

Hay una miríada de estándares, métricas y herramientas de medición para hacer esto, pero los equipos de gestión y los inversores siguen luchando con la complejidad, la falta de coherencia y la comparabilidad. Por eso la colaboración y el compromiso son tan vitales, para ayudar a impulsar ese consenso y esa simplificación y, en última instancia, para ayudarnos a todos a contribuir a la creación de valor a largo plazo para todos los stakeholders.

3. Involucrar a la comunidad empresarial

Si vamos a hacer que el valor a largo plazo y los stakeholders tengan un impacto en los nuevos estándares en la comunidad empresarial, ninguna organización puede hacerlo sola. Tenemos que trabajar juntos.

La buena noticia es que existe un gran impulso para la colaboración en este tema.

The Embankment Project for Inclusive Capitalism (EPIC, por sus siglas en inglés), reunió a más de 30 empresas globales con US$30t de activos bajo gestión para desarrollar y probar un marco para ayudar a las empresas a medir y reportar el valor a largo plazo que crean. Liderados por Coalition for Inclusive Capitalism y EY, todos trabajamos juntos — creadores de activos, administradores de activos y propietarios de activos — por más de 18 meses, para impulsar el consenso sobre lo que crea valor a largo plazo, y cómo lo medimos.

Muchos de estos aprendizajes han contribuido a un importante esfuerzo de colaboración convocado por The World Economic Forum’s International Business Council (IBC) del World Economic Forum. Bajo el liderazgo de Klaus Schwab del World Economic Forum y del Presidente del IBC y Bank of America, Brian Moynihan, el WEF y las Big Four están trabajando juntos para consolidar y simplificar un enfoque para medir la sostenibilidad a largo plazo y su impacto en la comunidad mundial, incluyendo el progreso hacia el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Este esfuerzo busca integrarse y alinearse con quienes establecen los estándares, como la Iniciativa de Reporte Global y el Consejo de Estándares de Contabilidad para la Sostenibilidad, así como otros esfuerzos líderes para medir el valor a largo plazo y el impacto de los stakeholders , incluyendo FCLT Global, Just Capital y el World Business Council for Sustainable Development.

Esto es lo que necesitamos: colaboración y compromiso centrados en la convergencia, la acción y, en última instancia, la rendición de cuentas. Si queremos crear un futuro más inclusivo, debemos unir fuerzas, crear una visión compartida y forjar un compromiso compartido.

4. Apoyar a las comunidades y proteger el medio ambiente

Los líderes empresariales deben incluir a sus comunidades y al medio ambiente como uno de sus principales stakeholders. La tasa de desempleo juvenil global es tres veces más alta que la tasa entre los adultos1. Se prevé que la automatización desplazará hasta 800 millones de trabajadores en todo el mundo para 20302. Y, como planeta, estamos muy lejos de los objetivos establecidos por el acuerdo de París sobre el cambio climático.

Estos son claramente grandes desafíos sociales. También presentan una enorme oportunidad para que los negocios sean una fuerza para el bien en el mundo.

Las empresas siempre han ocupado un papel único en la sociedad, con el poder de dar forma a los mercados e impactar en las comunidades de maneras que otras organizaciones no pueden replicar fácilmente. Ahora, podemos usar ese poder para ayudar a reconstruir la confianza en nuestras comunidades, abordar sus mayores desafíos y fortalecer las economías en todo el mundo.

Cada vez más, es también lo que la gente espera de nosotros. De hecho, el 76% de los encuestados en el Informe del Barómetro de Confianza 2019 de Edelman dice que los directores generales deberían tomar la iniciativa para impulsar el cambio en lugar de esperar a que el gobierno lo imponga.3

Todos vivimos en un tiempo notable. Tenemos herramientas, conocimientos y habilidades inimaginables a nuestra disposición, y si utilizamos mejor estos activos, podemos abordar muchos de los desafíos sociales y ambientales más difíciles del mundo. EY Ripples es nuestro compromiso de desempeñar un papel de liderazgo en las comunidades donde EY opera. A través de 150 países, estamos utilizando una gran cantidad de talento, conocimientos y redes poderosas para crear valor a largo plazo y lograr el propósito de EY de construir un mejor mundo laboral. También estamos empezando por nosotros mismos, evaluando nuestra propia huella de carbono y comprometiéndonos a realizar los cambios necesarios para reducirla.

Este es un momento crucial para los negocios. Está más claro que nunca que el éxito es algo más que nuestro resultado final hoy en día; también se trata de ayudar a los que nos rodean a prosperar a largo plazo. Los CEO ya no tienen que elegir entre hacer lo que es bueno para el negocio y lo que es bueno para sus accionistas. Pueden – y deben – hacer ambas cosas.

¿Cuándo pasarás el valor a largo plazo de la ambición a la acción? Únete a EY para discutir sobre los temas económicos y sociales más importantes mientras nos preparamos para la Reunión Anual del World Economic Forum 2020 – del 21 al 24 de Enero. Únete a la conversación a través de ey.com/wef y utilizando #WEF20 y #BetterWorkingWorld

Resumen

Las compañías están reconociendo que tienen una obligación con un conjunto más amplio de stakeholders, incluyendo su gente, comunidades y clientes. La definición actual de éxito no se limita a los resultados finales; para ayudar a sus empresas a prosperar a largo plazo, los líderes empresariales deben trabajar juntos y ampliar su enfoque ahora.

Acerca de este artículo

Por Carmine Di Sibio

EY Global Chairman and CEO

Apasionado por nuestros clientes y el poder de nuestra organización global. Facilitador del crecimiento y la innovación. Constructor de relaciones. Fanático de los deportes.

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