Los resultados de la 12ª encuesta anual de gestión de riesgos bancarios EY/IIF confirman que los directores de riesgos (CRO, por sus siglas en inglés) de la industria bancaria se enfrentan a un volumen y variedad extraordinarios de riesgos — tradicionales y emergentes, fuerzas externas y presiones internas — casi todos los cuales parecen estar aumentando en urgencia. Pero el mayor desafío de los CRO puede ser comprender cómo los riesgos que se cruzan pueden crear puntos de falla únicos o múltiples, incluso cuando las métricas tradicionales de gestión de riesgos parecen estables.
Considera cómo la combinación de riesgos geopolíticos y cibernéticos amenaza la resiliencia operativa y, al mismo tiempo, aumenta el riesgo de mercado, particularmente para las instituciones designadas como bancos globales de importancia sistémica (G-SIB), o cómo los desafíos macroeconómicos pueden revelar fuentes previamente ocultas de riesgo crediticio. La escasez de talento dificulta la gestión de los riesgos relacionados con la seguridad de los datos, la privacidad del consumidor y el uso de la inteligencia artificial (IA) y el aprendizaje automático. Las estrategias ambientales, sociales y de gobernanza (ESG), la transformación digital y el desarrollo de nuevos productos también requieren un pensamiento multidimensional por parte de los CRO. El aumento del riesgo regulatorio está presente en todos estos vectores.
En un entorno tan incierto y rápido cambio, las taxonomías compartimentadas de ayer y los procesos de modelado de riesgos convencionales pueden no tener en cuenta los impactos de múltiples eventos de riesgo simultáneos. La conclusión es que los CRO del sector bancario más eficaces deben destacar tanto en el ámbito estratégico como en el táctico y comprometerse a ayudar a la empresa a prestar servicios innovadores que satisfagan las expectativas cada vez mayores de los clientes.
El riesgo cibernético es la máxima prioridad de riesgo para los próximos 12 meses, según los CRO. Pero el riesgo crediticio pronto puede convertirse en un punto más focal si empeoran las condiciones económicas. Es notable que el 83 % de los CRO de G-SIB y el 62 % de los CRO para bancos europeos clasificaron el riesgo geopolítico como la máxima prioridad. El clúster de problemas en el siguiente nivel demuestra la compleja matriz de riesgo que enfrentan los CRO en la actualidad.