- Los créditos bancarios en España se reducirán, en términos netos, un 0,9% en 2024.
- Se prevé un leve aumento del 0,7% en el crédito al consumo para 2024, con expectativas de crecimiento en los próximos años.
- Se espera que la financiación bancaria total en la zona euro crezca un 3,1% en 2025 y un 4,2% en 2026.
España afronta el último trimestre de 2024 como el cuarto y último año de disminución de la financiación bancaria, a pesar de que es actualmente la economía que más crece de la zona euro, con un PIB proyectado del 2,8% este año. Este crecimiento relativamente fuerte se debe a la preponderancia del sector servicios en la economía, la baja dependencia de industrias con alto consumo energético, y la continua recuperación del turismo. Sin embargo, en términos de financiación bancaria total, el pronóstico del EY European Bank Lending Economic Forecast es que el mercado se contraerá por cuarto año, pero a menor ritmo ( -0,9% este año en comparación con el -3,4% en 2023). Entre las categorías de financiación, solo se prevé el aumento del crédito al consumo, con un incremento en 2024 del 0,7%, un 2,0% en 2025 y un 2,1% en 2026. Las conclusiones del EY European Bank Lending Economic Forecast se basan en datos de la Autoridad Bancaria Europea y los bancos centrales nacionales de Alemania, Francia, España e Italia que, en conjunto, representan más de tres cuartas partes de la zona euro por PIB.
Respecto a los préstamos a empresas españolas, se espera una reducción del 0,7% este año y la expectativa es que crezca un 2,2% en 2025 y un 1,5% en 2026. En lo que se refiere a las hipotecas, se reducirán un 1,7% debido en gran parte a la estructura de las hipotecas españolas, de tipo variable. Esto hace que el mercado de la vivienda esté expuesto antes a las fluctuaciones en los tipos de interés crecientes que muchos otros países de la zona euro. Se anticipa que el crecimiento de los préstamos hipotecarios se recupere a partir de 2025, a una tasa del 1,9%.
Roberto Diez Cerrato, socio responsable de Banca y Mercados Capitales de EY, valora la situación con optimismo, ya que "España se encuentra en un punto de inflexión, cerrando un ciclo de disminución en la financiación bancaria, pero con una economía que lidera el crecimiento en Europa. A pesar de la reducción prevista del -0,9% en la financiación total para este año, la proyección de crecimiento del PIB y la recuperación del crédito al consumo son aspectos positivos.”
Al comparar la situación de España con el resto de la eurozona, Pedro Pérez Iruela, Socio responsable de Servicios Financieros de EY, afirma que "España está bien posicionada para seguir el paso de las grandes economías europeas, donde se prevé un repunte generalizado en la financiación a partir de 2025. Aunque la estructura de los préstamos hipotecarios a tipo variable ha expuesto al mercado a fluctuaciones de los intereses más rápidamente, también nos posiciona favorablemente para beneficiarnos de una posible bajada de tasas en el futuro cercano."
Datos de la eurozona
Y es que, a pesar de que en 2024 el número de hipotecas en Europa registrará su menor incremento en más de una década, el EY European Bank Lending Economic Forecast sugiere que, a partir de 2025, asistiremos a un sólido aumento en todas las categorías de financiación. Se pronostica que la economía de la zona euro crecerá un 0,8% este año y un 1,4% en 2025, frente al 0,5% en 2023. Esto se debe en gran medida a la reactivación del sector industrial en Alemania, además de la expectativa de que los tipos de interés bajen y la inflación en la zona euro continúe suavizándose, aunque lentamente, durante el próximo año.
La actividad crediticia total en España, Alemania, Francia e Italia, que representan alrededor de tres cuartas partes de la economía de la zona euro, creció solo un 0,2% en 2023 y se espera la misma cifra en 2024. Pero si los intereses bajan el próximo año, como se proyecta, la expectativa de demanda de préstamos de empresas y consumidores aumentaría significativamente a partir de 2025, con un crecimiento de la actividad crediticia total mucho más fuerte. Del 3,1% en 2025, 4,2% en 2026 y 3,9% en 2027.
Préstamos hipotecarios
Se espera que la financiación hipotecaria no crezca en 2024, pero sí que se recupere el próximo año. Las hipotecas representan casi la mitad de la financiación total dentro de la zona euro y se pronostica que el crecimiento de las hipotecas en 2024 sea nulo, del 0,0%. Aunque la situación del mercado de vivienda en Alemania es difícil, con el aumento de los costos en los préstamos y la dificultad para acceder a ellos, se espera que esto cambie a partir de 2025 a medida que el crecimiento económico se consolide. Se prevé que el crecimiento de las hipotecas alcanzará el 2,8% en 2025, el 4,1% en 2026 y el 3,8% en 2027.
Créditos a empresas
El crecimiento de la financiación empresarial repuntará a partir de 2025. Se pronostica que los créditos corporativos en la zona euro crecerán a un débil 0,5% este año, en 2023 se redujeron un 0,1%, y alcanzarán un nuevo pico del 4,2% en 2026, impulsado por un fuerte incremento previsto en Francia y Alemania. El débil aumento esperado para 2024 es en gran medida el resultado final de los altos costos de préstamo corporativo sobre la inversión empresarial y los préstamos asociados, que se espera que ahora comiencen a suavizarse.
Crédito al consumo
A pesar del bajo incremento previsto en los préstamos no garantizados europeos este año (0,9%), se espera que la demanda aumente a partir del próximo año a medida que la inflación descienda, aunque lentamente, los mercados laborales se fortalezcan y la confianza del consumidor aumente. Aunque se espera que el crecimiento se mantenga por debajo de los niveles previos a la pandemia (que promediaron un 5% entre 2015-19), se proyecta que el crédito al consumo en Europa aumentará un 3,0% en 2025, un 4,2% en 2026 y un 3,9% en 2027. Se espera que Francia e Italia experimenten el mayor aumento en la demanda, mientras que Alemania y España informan del menor crecimiento en los préstamos no garantizados.
Tasa de morosidad
Si bien se prevé que la tasa de morosidad en todas las formas de financiación bancaria aumente año tras año, los niveles se mantienen muy por debajo de los registrados después de la crisis de la deuda de la zona euro, donde las proporciones alcanzaron un máximo del 8,4% en 2013. Se pronostica que la tasa de morosidad como porcentaje del total de préstamos en toda la zona euro aumentará al 2,0% en 2024 y al 2,3% en 2025 y 2026. Se espera que Francia, España e Italia vean proporciones similares y más altas de morosidad en 2024, con un 2,7%, un 3,0% y un 2,9% respectivamente, en parte debido al alto volumen de préstamos hipotecarios a tipo variable en ambos mercados, que dejan a los prestatarios más expuestos a costos más altos.
La regulación más estricta posterior a la crisis financiera global y los criterios de préstamo hacen que las personas hipotecadas estén mejor preparadas para lidiar con tasas más altas, mientras que los ahorros acumulados por los hogares durante la pandemia y las bajas tasas de desempleo en toda la región deberían proporcionar un colchón de apoyo contra el aumento de los costos de servicio de la deuda.
En el lado corporativo, un panorama mejorado tanto para los precios de la energía como para la inflación, y la reciente evidencia de un aumento en los márgenes de beneficio deberían actuar para limitar un aumento en la proporción de préstamos comerciales morosos.