5 minutos de lectura 5 set. 2022
Una lectura actual sobre los precios de minerales y perspectivas para el Perú

Una lectura actual sobre los precios de minerales y perspectivas para el Perú

Por David Warthon

Business Tax Advisory Partner, EY Perú

Enfocado en dar lo mejor y poder satisfacer las necesidades de nuestros clientes. Aprovecha sus tiempos libres para jugar fútbol.

5 minutos de lectura 5 set. 2022
Related topics Impuestos Mining and metals
Publicado en la revista Capebras el 5 de setiembre del 2022

Desde que la recuperación económica se propagó paulatinamente a nivel mundial a inicios de 2021 (rebote natural provocado por la pandemia), los precios de los minerales tuvieron un alza a nivel mundial, que se mantiene hasta el día de hoy. Esto implica que, en países con tanta inversión minera como el Perú, dicha alza se vea reflejada con una mayor recaudación en el impacto tributario y demás cargas que componen el llamado “Government take”, que no es otra cosa que el monto total de las ganancias empresariales que el Estado recibe por la producción, monto que incluye impuestos, regalías y otros gravámenes.

Para tener una idea del impacto que ha tenido dicha situación, a nivel de Perú la recaudación tributaria ha tenido incrementos históricos, como el de 2021, en donde la recaudación del sector minero se triplicó, y que nunca ha habido transferencias ingentes de fondos a los Gobiernos Locales y Regionales como lo hubo el año anterior.  

De hecho, en el primer trimestre del 2022 la recaudación se incrementó en más del 90 por ciento respecto del año anterior. En otras palabras, no ha habido en el pasado hechos similares de recaudación proveniente del sector minero. 

No obstante, si bien los hechos descritos nos llevan a gozar de una estabilidad en cuanto al tema recaudatorio por ahora, lo cierto es que las perspectivas para el caso peruano en particular no son las más alentadoras, y dicha situación no tiene que ver con los precios o su volatilidad sino más bien con la continuidad de la producción que es el tema que más nos afecta hoy; pero si bien todavía no se refleja, se verá reflejado de una manera más evidente en el corto – mediano plazo, si es que no se corrigen algunas situaciones que describiremos. 

En efecto, las paralizaciones sufridas en Las Bambas (MMG) y Cuajone (Southern Perú), lejos de mejorar y mantener un equilibrio en la producción que ayudaría a tener -consecuentemente- una recaudación sostenida, han contribuido a que ello no ocurra y en el corto plazo se sienta una disminución en los ingresos al fisco, lo que a su vez implica un menor canon y menores transferencias a Gobiernos Locales y Regionales, situación que en el caso concreto no se debe a factores externos sino a asuntos específicamente relacionados con la gestión de las autoridades peruanas para enfrentar estos temas.

Nótese que los precios aún continúan elevados, una situación que debería ser aprovechada de la mejor manera por el Gobierno; máxime si es que dichas cotizaciones internacionales son cíclicas y no eternas, pudiéndose aprovechar de mejor manera la presente “ola” de precios. 

Ello, si bien no se evidencia hoy de una manera significativa, lo claro es que la tendencia nos llevará indefectiblemente a una menor recaudación, si es que no se logra destrabar los proyectos paralizados. Creo que los proyectos nuevos o recién puestos en operación contribuirán con una mayor producción, pero la situación de paralización no es sostenible en el tiempo viéndose dicha recaudación impactada considerando la envergadura de tales proyectos.

Aquí hay un punto importante que debemos abordar teniendo en cuenta lo descrito anteriormente; y se refiere a una pregunta que desde hace mucho tiempo se ha puesto sobre la mesa respecto a la competitividad minera peruana en materia fiscal: ¿es el Perú un país competitivo fiscalmente hablando?  

Primero, debo indicar que sobre el tema de la competitividad minera existen muchas formas de medirla desde el punto de vista fiscal, la cual no sólo tiene que ver con tasas nominales de recaudación (tasas del Impuesto a la Renta) en comparación con otras jurisdicciones, tasas de gravámenes, deducciones, impactos no fiscales, temporalidad de escudos fiscales, entre otros.

Cabe indicar que estudios de competitividad minera realizados por el Instituto Peruano de Economía (IPE), así como el último estudio realizado por el Fondo Monetario Internacional (FMI) hace dos meses, sitúan al Perú como un país competitivo en minería, es decir, es un país que tiene un sistema progresivo el cual permite que pueda recaudar más cuando los precios son elevados (como en estos últimos tiempos), lo cual es corroborado de manera evidente con lo señalado en el análisis presentado en la parte inicial de este artículo.  

El principal resultado del estudio es que el régimen fiscal vigente en Perú es competitivo, principalmente, por el uso de gravámenes específicos basados en las utilidades. Asimismo, si bien sostiene que este régimen permite cierto espacio (moderado) para aumentar la presión fiscal del sector sin perder competitividad internacional, anota que es muy importante la forma en que ese aumento se materialice y que los cambios que proponga el gobierno eviten modificar la posición relativa de la carga fiscal en Perú respecto de la de sus competidores
Ministerio de Economía y Finanzas
(MEF)

Al respecto, cabe señalar que hace varios años no han existido modificaciones estructurales a la legislación tributaria minera, siendo el mismo marco normativo el que ha permitido actualmente una mayor recaudación simplemente por el alza de los precios de los minerales, lo que refleja que aun cuando existan espacios para mejorar el sistema, éste se debe mantener.

Aquí una acotación importante en cuanto a la medición o comparación en la región respecto a la “competitividad en materia minera”. Creo que dicho concepto, además de incluir una comparación de regímenes tributarios como tasas y demás variables tributarias que se han detallado en los párrafos precedentes y pueden ser muchas y además muy técnicas, deben medirse incluyendo algunas otras aristas como, por ejemplo: (i) accesos de barrera al negocio minero en general; (ii) predictibilidad de las actuaciones por parte del ente recaudador (SUNAT); (iii) disminución de la litigiosidad; (iv) regímenes de incentivos fiscales para la inversión minera (devolución anticipada y/o definitiva del IGV por ejemplo); (v) temporalidad y aplicación de escudos fiscales, no siendo una lista definitiva sino que más bien podría incluir situaciones particulares por la legislación específica de cada país que no será la misma.

Es importante apuntar que, en cuanto a la perspectiva de lo que se viene, conforme a lo señalado en el Mineral & Mining Convention - PDAC 2022 realizado hace algunos días en la ciudad de Toronto (Canadá), el Gobierno peruano estaría trabajando para prevenir los conflictos sociales en torno a la industria minera, conforme lo señaló la ministra de Energía y Minas. 

Se aseveró, además, que se está trabajando para habilitar siete proyectos por US$ 4,400 millones este año, situación que sería muy relevante para la inversión actual que se encuentra en una etapa de incertidumbre.

En consecuencia, la perspectiva peruana en cuanto al desarrollo minero (que a su vez redunda en una recaudación sostenida e importante) podría tener un buen horizonte si se cumplen dos situaciones que están intrínsecamente entrelazadas, puesto que de ocurrir lo contrario será inevitable una caída en la recaudación tributaria.

En primer lugar, es importante mantener la producción sostenida resolviendo los conflictos sociales que actualmente no han sido gestionados de la mejor manera.  Objetivamente, podemos notar que la conflictividad social no es una cuestión propia de este Gobierno, puesto que siempre han existido conflictos sociales y eso es evidente, no obstante, la situación actual requiere gestionar de manera óptima salidas rápidas, efectivas y que puedan convocar a las dos partes respecto a sus expectativas, hecho que es el principal reto de este Gobierno para el ámbito minero. 

En segundo lugar, se debe incentivar el desarrollo de  los proyectos en cartera que están identificados, pues esto aseguraría que se aumente la producción y, de existir una caída de precios internacionales de los minerales, la mayor producción pueda compensar esta disminución, teniendo como consecuencia que ante una recaudación exitosa, se puede realizar una mayor transferencia de recursos a los Gobiernos Locales y Regionales, que pueden ser utilizados en obras de infraestructura que el Perú tanto necesita. 

Resumen

Desde el inicio de la recuperación económica a nivel mundial debido a la pandemia del Covid-19, los precios de los minerales tuvieron un alza en todo el mundo, que se mantiene hasta la actualidad. ¿Cómo afecta esta situación a países con alta inversión minera como el Perú?

Acerca de este artículo

Por David Warthon

Business Tax Advisory Partner, EY Perú

Enfocado en dar lo mejor y poder satisfacer las necesidades de nuestros clientes. Aprovecha sus tiempos libres para jugar fútbol.

Related topics Impuestos Mining and metals