Employee Experience: Cerrando las brechas a través del trabajo reimaginado

El EX es, hoy por hoy, más importante que nunca, ya que su influencia impacta tanto en las estrategias de RR.HH. como en la capacidad de las organizaciones para lograr sus principales objetivos comerciales. Pese a ello, las iniciativas en materia de EX aún presentan vacíos organizacionales como la falta de apoyo ejecutivo, medición deficiente, mecanismos de retroalimentación inconsistentes y herramientas insuficientes para escuchar la voz del empleado lo cual proporciona una visión incompleta del recorrido del empleado (journey) y sus principales necesidades al interior de la empresa o momentos de la verdad.

A raíz de la pandemia muchas empresas han emprendido una reinvención del trabajo, que consiste en reimaginar y replantear la forma de trabajar, de liderar el cambio y de recrear la experiencia de los colaboradores. La nueva realidad laboral se caracteriza por un esquema de trabajo híbrido, flexibilidad como atributo imprescindible, la tecnología como habilitador y una oferta de valor al empleado “personalizada”.

Y aunque todos al interior de una organización puedan estar de acuerdo con que los líderes tienen las mejores intenciones, aprender e impulsar algo relativamente nuevo requiere mucha atención al detalle y sobre todo conectar, de manera empática, con las personas.

La pandemia producida por la COVID-19 ha terminado por evidenciar las condiciones cambiantes que la fuerza laboral debe enfrentar día a día, por lo que el EX se vuelve más importante que nunca. A medida que más empleados se han convertido en trabajadores remotos, el equilibrio entre el trabajo y la vida privada ha adquirido mayor importancia a medida que los trabajadores intentan gestionar las nuevas responsabilidades del aprendizaje a distancia para sus hijos o el cuidado de familiares enfermos.

Tanto los líderes como los colaboradores están de acuerdo en que un buen EX genera resultados positivos para el ambiente laboral, reflejándose en un trabajo de mayor calidad, mayor agilidad y productividad. Además, es mucho más probable que el empleado permanezca en su organización por un mayor tiempo y refieran a sus contactos para los puestos vacantes.

Finalmente, un punto importante a considerar para mejorar el EX es conocer lo que los empleados esperan acerca de la flexibilidad. En una encuesta realizada recientemente por EY los empleados indicaron que esperan trabajar entre 2 y 3 días de forma remota después de la pandemia; dos tercios de los empleados querrían que sus empleadores les proporcionaran horarios flexibles de inicio y finalización y otro tercio de los empleados quieren que sus empleadores ofrezcan semanas de trabajo más cortas.

Definitivamente la gestión de experiencia de los empleados no invita a replantear cómo queremos vivir nuestro propósito y cómo vamos a agregar valor a la organización a través de nuestro rol para alcanzar los desafíos de la productividad, la eficiencia organizacional y el aprendizaje 360 grados del talento líquido que se incorpora y se reconvierte al interior de nuestras organizaciones.