La semana pasada se abrió el plazo de información pública del proyecto del Real Decreto que aprobará próximamente el Reglamento que establece los requisitos que deben adoptar los sistemas y programas informáticos o electrónicos que soporten los procesos de facturación de empresarios y profesionales, y la estandarización de formatos de los registros de facturación.
Dicho Reglamento, esperado inicialmente como desarrollo de la previsión legal introducida en la Ley General Tributaria el año pasado en el sentido de prohibir la utilización de software de doble uso, va sin embargo mucho más allá y configura, voluntariamente por el momento, la obligación para todos los empresarios y profesionales de disponer desde 2024 de herramientas de facturación y remisión de registros conectadas de manera continuada con la Agencia Tributaria.
Si bien las grandes empresas quedan de momento excepcionadas por su actual inclusión en el SII, la provisión de registros en tiempo real y el proceso de verificación de facturas expedidas por parte de la AEAT reguladas ahora, superan en muchos aspectos al sistema de suministro tal y como lo conocemos desde 2017.