El informe de IE University y EY "La empresa familiar ante el nuevo entorno laboral" revela que la empresa familiar enfrenta desafíos significativos en la retención de empleados debido a la insatisfacción con el salario, la falta de oportunidades de ascenso y la carencia de flexibilidad laboral
Las empresas familiares se enfrentan a un entorno laboral y de innovación cada vez más desafiante y competitivo. En un contexto laboral en constante evolución, estas empresas deben adaptarse a las nuevas demandas de los trabajadores, quienes buscan mayor flexibilidad, mejores salarios y nuevas oportunidades de crecimiento, adaptando su modelo a las nuevas tendencias y políticas de las compañías más innovadoras en atracción y retención del talento.
La batalla por el talento se ha intensificado, y las empresas familiares no pueden quedarse atrás, el informe de IE University y EY "La empresa familiar ante el nuevo entorno laboral" revela que estas empresas enfrentan desafíos significativos en la retención de empleados debido a la insatisfacción con el salario, la falta de oportunidades de ascenso y la carencia de flexibilidad laboral.
A esto se suma que, en los últimos años, las empresas han llevado a cabo procesos de digitalización e innovación centrados en el negocio y en la gestión financiera, donde afrontan retos no menores, como la llegada de la inteligencia artificial y un aumento normativo continuo, lo que crea un panorama especialmente desafiante.
En base a todo esto, las empresas familiares españolas enfrentan el reto de equilibrar la conservación de sus valores y transmitirlos a través de sus equipos con la adopción de innovaciones para mantenerse competitivas. Para ello, deben gestionar eficientemente la innovación mediante una monitorización rigurosa y delegando a talentos capacitados, mientras satisfacen las demandas de unos empleados con necesidades distintas a las que han gestionado en años anteriores.
A pesar de estos desafíos, las empresas familiares poseen fortalezas inherentes que pueden aprovechar. Su visión a largo plazo, agilidad y cercanía en la toma de decisiones, mentalidad emprendedora y capacidad para crear un sentido de pertenencia y compromiso entre sus empleados son características que les otorgan una ventaja competitiva.
Para enfrentar estos desafíos y aprovechar sus fortalezas, algunas estrategias destacan por encima de otras:
- Propósito corporativo claro: Comunicar un propósito fuerte y claro, unido al deseo de transmitir el legado familiar, genera una visión pragmática de los desafíos de la innovación y del entorno laboral. Apostar por proyectos que generen estabilidad y con retornos a largo plazo puede ser crucial para atraer y retener talento.
- Ser agentes de cambio: Los miembros de la familia empresaria deben liderar el impulso hacia la innovación y generar una cultura innovadora dentro de la empresa que permita entornos de trabajo flexibles para satisfacer las demandas actuales.
- Diseñar estrategias transversales: Involucrar a todas las unidades de negocio en las estrategias de innovación, estableciendo objetivos claros y resultados esperados mejorando también la movilidad interna.
- Monitorizar y delegar la innovación: La familia debe supervisar el progreso de los proyectos de innovación y delegar la ejecución a los mejores talentos disponibles.
- Equidad en la empresa: Diseñar mecanismos que aseguren la equidad y transparencia en la evaluación y reconocimiento de los empleados, permitiendo compensaciones competitivas y claras oportunidades de ascenso profesional.
- Bienestar y flexibilidad laboral: Promover iniciativas que favorezcan el bienestar físico, mental y social de los empleados para mejorar la retención. Adaptar políticas de trabajo que ofrezcan mayor flexibilidad, como el teletrabajo y horarios flexibles, es esencial para satisfacer las demandas modernas de los empleados.
En resumen, en un entorno donde las necesidades y expectativas de los empleados están en constante evolución, las empresas familiares españolas tienen una oportunidad única para liderar en la creación de ambientes de trabajo que les permitan maximizar sus fortalezas inherentes y jugar un papel crucial en la economía debido a su capacidad de adaptarse y mantener su relevancia en un entorno cambiante. Para ello, deben adoptar estrategias flexibles y orientadas al futuro para mantener su rentabilidad y asegurar ser un empleador atractivo, manteniendo su competitividad en la captación de talento y la innovación.