Rodrigo Barrios

Presupuesto y cambios tributarios: claves de EY Uruguay para entender el impacto en ciudadanos y empresas

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El proyecto de ley de Presupuesto incorpora nuevas reglas fiscales e introduce ajustes tributarios que van desde el Impuesto Mínimo Global hasta cambios en compras web e inversiones en el exterior

El proyecto de ley de Presupuesto que ingresó al Parlamento incluye un conjunto de disposiciones que buscan ordenar las cuentas públicas y, al mismo tiempo, introducir cambios en materia tributaria con impacto tanto en ciudadanos como en empresas.

Para Rodrigo Barrios, socio de Tax en EY Uruguay, el proyecto de ley de presupuesto se presenta en un contexto complejo, con estimaciones macroeconómicas y restricciones propias de un horizonte de cinco años. “Se trata de una propuesta que, además de fijar la asignación de recursos para los próximos cinco años, incorpora medidas tributarias con efectos directos en la economía y en la vida cotidiana”, explicó.

El especialista subrayó que un presupuesto no es solo un documento técnico, sino una hoja de ruta. “Define la forma en que el país va a administrar sus recursos y, por eso, tiene repercusiones que alcanzan tanto al sector privado como a cada persona en su vida diaria”, dijo.

Un marco de disciplina fiscal

El proyecto define pautas para los próximos cinco años sobre gastos e inversiones del Estado, incluyendo cómo se utilizarán los recursos y cómo se gestionará la deuda. “No se establece un límite de gasto, sino una meta unidimensional vinculada a la deuda. Esto refleja la intención de generar convergencia fiscal y mejorar el resultado fiscal en 1,5 puntos porcentuales del PIB a lo largo del período”, señaló Barrios.

En su visión, esta regla constituye “una señal de sostenibilidad y de disciplina en el manejo de las cuentas públicas”, en línea con compromisos internacionales y con la necesidad de fortalecer la confianza en el país como destino de inversión.

Barrios señaló que esta regla fiscal busca dar señales de sostenibilidad y confianza a los inversores, lo que fortalece el atractivo de Uruguay como destino de inversión.

Impuesto Mínimo Global

En materia tributaria, uno de los cambios más relevantes es la incorporación del Impuesto Mínimo Global (IMG), acordado en el marco de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

“Este impuesto aplica a grupos multinacionales con facturación superior a 750 millones de euros. No significa que las empresas paguen más en total, sino que se asegura que el tributo quede en el país donde operan, en este caso Uruguay”, explicó Barrios.

De esta forma, Uruguay se alinea con una tendencia internacional que busca evitar la erosión de bases imponibles y asegurar que las grandes corporaciones contribuyan en los territorios donde generan valor.

El socio de EY aclaró que no se trata de una medida aislada, sino de un cambio de alcance global. “Más de 140 países adhirieron a este acuerdo. Para Uruguay implica alinearse con compromisos internacionales y con una tendencia global que busca asegurar mayor transparencia tributaria”, comentó.

Rodrigo Barrios

Ganancias de capital en el exterior

Otro de los puntos previstos es la modificación del tratamiento de las inversiones de uruguayos en el extranjero. Hasta ahora, las ganancias de capital – incrementos patrimoniales según la norma tributaria – obtenidas fuera del país no estaban gravadas. Con el Presupuesto, se plantea equipararlas con las generadas dentro del territorio nacional.

“La medida busca generar condiciones de equidad: que la renta derivada de inversiones, sea en Uruguay o en el exterior, tenga un tratamiento homogéneo. También corrige un desincentivo a la inversión local que existía en la normativa vigente”, indicó Barrios.

Para el especialista, este ajuste está dirigido a un grupo reducido de contribuyentes, pero busca asegurar condiciones de equidad entre las rentas generadas en Uruguay y las que provienen del exterior. “Lo que se pretende es que la decisión de invertir no dependa de la ventaja fiscal, sino de criterios económicos”, afirmó.

Compras web y "efecto Temu"

Las compras por internet desde el exterior, que alcanzaron cifras récord en 2024 y 2025, también forman parte de las modificaciones. El proyecto incorpora el cobro de IVA a este tipo de operaciones e introduce ajustes en el régimen de franquicias.

“La idea es igualar el tratamiento tributario entre las compras locales y las que se realizan a través de plataformas internacionales. Se establece un sistema de franquicias más acotado, con hasta tres compras anuales por un total de 800 dólares”, detalló el socio de EY.

De acuerdo con Barrios, esto responde a reclamos del comercio local, que considera que la situación actual genera una competencia desleal. “El objetivo es equilibrar, contemplando tanto a los comerciantes como a los consumidores que utilizan estas plataformas”, añadió.

El especialista recordó que este tipo de ajustes ya fueron aplicados en otros países y que, en general, generan un período de adaptación. “Al inicio puede haber resistencia, pero con el tiempo se logra un esquema más equitativo”, dijo.

Impacto en ciudadanos y empresas

Más allá de los aspectos técnicos, el Presupuesto tiene implicancias concretas. Para los ciudadanos, el cambio más visible será en el régimen de compras web y en la tributación de inversiones en el exterior.

“Quienes compran habitualmente en plataformas extranjeras verán modificaciones en las condiciones de acceso, mientras que los residentes con inversiones fuera del país deberán considerar la nueva carga tributaria”, indicó Barrios.

En el caso de las empresas, la adaptación al Impuesto Mínimo Global exigirá ajustes administrativos y de cumplimiento. “Si bien no implica mayores impuestos en términos absolutos, sí supone adecuarse a una normativa internacional compleja”, aclaró.

La importancia de entender los cambios

Barrios destacó que, en todos los casos, la anticipación es clave. “Tanto para una empresa como para un individuo, entender a tiempo qué cambia permite planificar y evitar sorpresas”, señaló. Desde la perspectiva de EY Uruguay, acompañar la discusión es clave para que todos comprendan el alcance de las medidas.

“Nuestra misión es acercar estos temas técnicos de manera clara, porque impactan en el día a día y en la planificación a largo plazo. Entenderlos permite anticiparse y tomar mejores decisiones”, subrayó Barrios.

El socio concluyó que este Presupuesto, por su alcance y por los compromisos internacionales que refleja, “marca un paso importante en la convergencia fiscal y en la modernización del sistema tributario uruguayo”.

Resumen

El proyecto de ley de Presupuesto en Uruguay combina reglas de disciplina fiscal con cambios tributarios de impacto en empresas y ciudadanos. Introduce una meta vinculada a la deuda pública para reforzar la sostenibilidad fiscal y alinea al país con compromisos internacionales. En materia impositiva, incorpora el Impuesto Mínimo Global para multinacionales, grava las ganancias de capital en el exterior y ajusta el régimen de compras web, limitando franquicias y aplicando IVA. Según EY Uruguay, estas medidas buscan equidad, transparencia y competitividad, aunque exigirán adaptación de contribuyentes y empresas.