El documento señala que tanto las horas trabajadas por ocupado como el empleo contribuyeron a la recuperación del tiempo de trabajo, y la disminución del paro y de las restantes medidas de infrautilización de la mano de obra se ha acelerado en este periodo. Se prevé, además, que las vacantes crezcan menos de lo sugerido por la contracción del paro, lo que apuntaría a una mejora de la eficiencia de los emparejamientos laborales.
Por su parte, la caída de la productividad por hora redujo el PIB por persona ocupada. Y la revalorización del salario por hora trabajada y por ocupado en las grandes empresas se moderó, pero la retribución por asalariado y los costes laborales unitarios cobraron impulso. Además, España, que en el pasado duplicaba la tasa de temporalidad media de la UE, ha convergido con las economías de su entorno. Sin embargo, sigue liderando el ranking europeo de tasas de transición del empleo al paro. La reducción de estas tasas se ha detenido a partir de 2022.
En 2024, el número de fijos discontinuos activos creció en la EPA, y los demandantes de empleo con relación laboral, que incluyen los fijos discontinuos en periodo de inactividad, alcanzaron su nivel más alto desde la aplicación de la reforma del mercado de trabajo. La tasa de rotación de la afiliación al Régimen General de la Seguridad Social apenas ha variado desde el segundo año de aplicación de la reforma laboral. Al tiempo que la EPA evidencia una reducción constante de los flujos de empleo asalariado, en línea con el patrón anterior a la pandemia.
En conjunto, estos datos indican que los efectos en el corto y medio plazo de la reforma laboral sobre las tasas de rotación han sido limitados y parecen haberse agotado. Las diferencias de género en las tasas de participación laboral y empleo se han trasladado a divergencias en las carreras contributivas. A partir de la cohorte de 1960, estas brechas se han reducido sustancialmente a costa de un descenso de la fecundidad, entre otros factores. Las desigualdades en la carrera contributiva aún representan entre 7 y 8 años en las últimas cohortes en edad de jubilación. Las reformas de la jubilación afectaron a la brecha de género en las salidas del mercado laboral. La ratio entre jubiladas y jubilados, que era de 0,36 en 1997, aumentó hasta 0,80 en 2023. Las diferencias salariales y de años cotizados entre hombres y mujeres se traducen en brechas importantes en la base reguladora.
Por último, la jubilación parcial es poco utilizada y no está claro si los cambios de 2025 la reactivarán. La jubilación demorada (más allá de los 65 años) siempre ha sido minoritaria. La reforma de 2021 incentivó esta opción, pero solo antes de los 67 años. La jubilación activa, introducida en 2013, no ha despegado, especialmente entre mujeres.
Actualidad Jurídico-Laboral
Entre las novedades normativas de la última edición del Human Capital Outlook analizamos los últimos cambios normativos relevantes: el Real Decreto-Ley 11/2024, que introduce medidas para compatibilizar la pensión de jubilación con el trabajo; la Ley Orgánica 1/2025 que restablece la nulidad objetiva de los despidos para quienes soliciten permisos para el cuidado de familiares; el Real Decreto-Ley 1/2025 que actualiza las pensiones y redefine las bases de cotización; y el RD 87/2025 que eleva el SMI a 1.184 euros mensuales.
Por otro lado, el Tribunal Supremo ha despejado varias cuestiones importantes: la STS de 21/11/2024 modifica el criterio seguido por la Audiencia Nacional y declara que no es necesario revelar datos individuales en el registro retributivo y prioriza los derechos de privacidad de los trabajadores; la STS de 19/12/2024 rechaza la posibilidad de incrementar la indemnización legal por despido improcedente a criterio del juzgador, entre otras cuestiones.
Tendencias en Capital Humano
En cuanto al apartado de Tendencias en Capital Humano, esta edición aborda el creciente impacto de las microcredenciales en el desarrollo profesional y la empleabilidad. Estas credenciales digitales, diseñadas para certificar habilidades específicas de manera ágil y flexible, están transformando la forma en que trabajadores y empleadores acceden a la formación continua. El informe elaborado por la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA) y EY analiza su evolución en España, destacando su papel en la adaptación a un mercado laboral en constante cambio y su potencial para mejorar la competitividad de los profesionales.