- Los hogares españoles, entre los más satisfechos con los servicios digitales, pero entre los más preocupados por las subidas de precios.
- Las familias demandan servicios digitales de calidad y acceso a conexión estable, al tiempo que muestran creciente preocupación por la privacidad y la seguridad online.
¿Están los consumidores satisfechos con la tecnología de sus hogares? ¿Se mantendrán los hábitos de consumo digitales generados durante la pandemia? En España, un 43% afirma que sí los mantendrá. No obstante, el incremento de los costes y el aumento de la presión sobre las economías familiares hace que crezca la preocupación por el precio de la conectividad. Además, en esta nueva fase postpandemia, los consumidores se replantean aspectos como su relación con los proveedores o la calidad-precio de los servicios contratados y emergen nuevas inquietudes como la protección de su privacidad o la sostenibilidad.
Estas son algunas conclusiones del informe de EY Decoding the digital home 2022, una encuesta global sobre las tendencias de consumo doméstico de productos y servicios de tecnología, medios y telecomunicaciones, efectuada a más 20.000 hogares de ocho países, entre ellos, España. Los resultados ponen de manifiesto que nuestro país es uno de los mejor conectados y que mejor valoran la calidad de los servicios digitales en los hogares, pero también uno de los más preocupados frente una posible subida de precios y ante la seguridad y privacidad de los datos.
¿Cuáles son las principales preocupaciones en lo referido al consumo de tecnología? Para un 73% de los hogares en España, el aumento de precio en la conexión a internet. Adicionalmente, el 48% admite estar más preocupado por la privacidad y seguridad de sus datos personales tras la pandemia. De igual forma, los consumidores españoles perciben un exceso de oferta y contenidos en el mercado, y un 41% muestra dificultad a la hora de encontrar contenido en las diversas plataformas y aplicaciones, según el informe de EY.
Preocupación por los costes
El estudio de EY indica que el aumento del coste de la vida está provocando una presión importante en el consumo digital de los hogares. De hecho, siete de cada diez hogares españoles teme que los proveedores de banda ancha aumenten sus tarifas, una cifra superior a la media global: el 60%. De igual forma, el 67% teme esta subida para los proveedores de contenidos audiovisuales -como la TV de pago o el streaming- y, por último, el 43% cree que paga demasiado por contenidos que no consume.