EY ha presentado el EY Luxury Client Index, un estudio internacional que analiza los factores que impulsan las decisiones de compra en el sector del lujo. En su edición española, el informe revela un consumidor optimista, exigente y cada vez más consciente, que prioriza la calidad, la autenticidad y el valor tangible por encima del estatus.
El 88% de los consumidores españoles afirma que tiene intención de seguir comprando moda de lujo en los próximos 12 meses, y un 64% prevé aumentar su presupuesto, ocho puntos por encima de la media global (56%). Este comportamiento sitúa a España como uno de los mercados más dinámicos del sector, con un cliente que ha integrado el lujo en su estilo de vida de forma habitual: el 62% compra productos de lujo al menos tres veces al año, en línea con la media global (61%).
“El consumidor español de lujo no solo mantiene su compromiso con el sector, sino que eleva sus expectativas. Busca marcas que justifiquen su inversión con propuestas auténticas, coherentes y con impacto”, señala Transy Rodríguez Alonso, socia responsable del sector de bienes de consumo y distribución en EY. “El sector sigue atrayendo a consumidores, pero necesita reconectar con ellos desde la experiencia de compra, la calidad visible y la sostenibilidad”.
La ropa es la principal puerta de entrada al lujo en España (54%), ligeramente por encima del dato global (51%). La tienda física se mantiene como el canal preferido (68%) y mejor valorado: un 72% se declara “extremadamente satisfecho” con su experiencia presencial. No obstante, el canal online gana relevancia, especialmente por su conveniencia (55%) y variedad (55%).
En cuanto a sostenibilidad, el uso de materiales innovadores (42%) y el packaging responsable (42%) son las iniciativas más valoradas. La diversidad e inclusión también ganan peso en España, donde alcanzan un 40% de valoración, frente al 31% global. Sin embargo, la economía circular (18%) y el apoyo a comunidades locales (24%) tienen menor protagonismo, lo que indica áreas con margen de desarrollo.
“El cliente aspiracional español busca experiencias con significado, productos diferenciados y marcas capaces de proyectar valor más allá del precio”, afirma Macarena Gutiérrez, socia responsable del sector Retail y Consumo en EY-Parthenon. “Las firmas que sepan conectar con estas prioridades podrán fidelizar a un consumidor cada vez más informado, exigente y dispuesto a explorar nuevos modelos”.
Entre estos modelos destacan el mercado de segunda mano y el alquiler. El 54% de los encuestados compraría productos de segunda mano si son certificados y ofrecidos directamente por la firma, y un 50% considera el alquiler una opción válida. Estas fórmulas no canibalizan el negocio tradicional, sino que lo amplían y refuerzan la fidelidad.