En el marco del proyecto “Emprendedores Argentinos: UN FUTURO QUE INSPIRA”, cocreado entre EY y LA NACION, Souviron recuerda los comienzos de la compañía, los desafíos del crecimiento y el impacto de los cambios tecnológicos y culturales en el negocio de los viajes. También reflexiona sobre la importancia de formar equipos con diversidad de pensamiento y visión a largo plazo.
Fundó Despegar cuando internet apenas despegaba. Dos décadas después, Roberto Souviron es uno de los emprendedores tecnológicos más influyentes de la región y un caso testigo de cómo escalar un negocio desde América Latina al mundo. “Emprender no es solo tener una idea: es aprender a cambiar y a evolucionar todo el tiempo”, asegura y lo demuestra con su historia actual como fundador de escuelas en zonas de vulnerabilidad que han ganado premios internacionales.
Con una mirada estratégica y realista, destaca que el mayor activo de un emprendedor no es el producto ni la inversión, sino la capacidad de aprender rápido, adaptarse y ejecutar con precisión. “Lo más difícil de emprender es aprender a cambiar” es la lección que deja Roberto Souviron.