La brecha de género y la integración diversa en las empresas es tanto un desafío como una demanda de la sociedad, particularmente de las nuevas generaciones. Fomentar el ingreso de mujeres a las carreras tecnológicas y desarrollar liderazgos femeninos son dos misiones que las compañías deben establecer para achicar las diferencias. En el segundo capítulo del encuentro “Empresas en acción: cómo prosperar en un mundo digital”, organizado por LA NACION, tres mujeres en puestos de dirección conversaron sobre la problemática y cómo buscan resolverla en sus organizaciones.
Mariana Taillade, socia de Technology Risk, Consulting Services y sponsor de Women in Tech en EY Argentina, lidera una iniciativa que busca que más mujeres se desarrollen en el mundo STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas). “La desigualdad se genera por sesgos o estereotipos que traemos desde que éramos chicos, por los cuales se piensa que ciertas habilidades son más para hombres que para mujeres”, opinó.
Jorgelina Rossi es gerente general de Prevind, una empresa abocada al control y preparación contra incendios. Si bien su empresa tiene un 57% de mujeres, admite que le cuesta encontrar talento femenino para nuevos puestos. “Hay un faltante importante en técnicas de seguridad e higiene, electromecánicas e ingenieras”, dijo.
Como directiva debió liderar a su empresa en un momento de mucha incertidumbre. La compañía tuvo un rol esencial durante la pandemia, debido a que los espacios de trabajo que antes preparaban contra incendios se trasladaron a los hogares. “Que las personas estén en sus hogares implicó que ocurrieran más accidentes imprevistos por usar más las instalaciones. Tuvimos que estar presentes, porque lo que protegían en los lugares de trabajo se trasladó a los hogares”, contó Rossi, que llegó a CEO a los 31 años.
Por su parte, Verónica Giménez, people executive director de Globant para Latinoamérica, compartió la preocupación sobre la falta de mujeres en el mundo tecnológico y la importancia de generar y retener perfiles femeninos. “Hay una gran brecha y son pocas las mujeres que se insertan en este tipo de habilidades”, explicó.
En Globant, llevan adelante diversos programas para acompañar, contratar y generar liderazgos femeninos. En primer lugar, se acercan a escuelas para inspirar a jóvenes a ser parte de la industria. También buscan visibilizar a referentes del rubro con un premio que ya lleva más de 12.000 nominaciones. Además, acompañan dentro de la organización con un programa de mentoreos y tienen el objetivo de capacitar a más de 15.000 mujeres antes de 2025. Lanzaron 300 becas, de las cuales el 60% fueron para mujeres.
“A veces somo nosotras mismas las que nos autolimitamos. Se cambia con mucho coaching y mentoreo para acompañar a las chicas, arrancando en sus primeros trabajos para potenciarlas con herramientas. Tenemos una red de mujeres con cursos de power up y mentorías reversas para fortalecerlas. Es importante visibilizar a las mujeres en posiciones de liderazgo”, dijo Taillade.
Taillade contó que en la Argentina el porcentaje de mujeres que ingresan a las carreras universitarias es superior al de los hombres, pero se ve mayor deserción. “Hay que acompañar para que finalicen sus etapas”, alentó.
Sobre los liderazgos que deben llevar adelante estos desafíos, Giménez explicó que es importante el autoconocimiento y la delegación de confianza en los equipos para que puedan tomar decisiones y ser autónomos. “Hay que acompañar a cada persona para que pueda encontrar su propósito, para que al final del día disfrute de lo que hace. Es importante la formación de líderes, el feedback 360 y poder trabajar competencias en este momento, donde además es clave ser líderes conscientes y empáticos. El autoconocimiento es lo que ayuda muchísimo a poder ser exitosos. La motivación de los equipos está ligada a los vínculos”, concluyó.
