Los padres descubrieron los beneficios de estar más involucrados en la educación de sus hijos y planean mantener un mayor nivel de implicación que antes de la pandemia. Se dieron cuenta de la importancia de estar al tanto de lo que aprenden sus hijos, de cómo se comportan en clase y de cómo interactúan con otros estudiantes. La mayoría de los padres no quiere perder de vista estos aspectos de la educación y el avance de sus hijos una vez que se reabran las escuelas. De ahí que el 62% de los padres de todos los grados tengan previsto implicarse más en la educación y las actividades escolares de sus hijos que antes del confinamiento.
Los padres siguen creyendo que las colegiaturas deberían ser más bajas ya que los alumnos no están usando las instalaciones de la escuela
En los tres países, el 75% de los padres está de acuerdo con que las colegiaturas deben mantenerse más bajas si continúan las clases en línea. Aunque las escuelas hayan mejorado los cursos online, los padres siguen creyendo que deben dedicar mucho esfuerzo, ya que los niños no son del todo independientes. Aunque al 63% de los padres le gustan más las clases en línea de los últimos meses, cerca del 64% sigue creyendo que la interacción profesor-alumno continúa siendo escasa y el 66% considera poco atractivo pasar demasiado tiempo frente a una pantalla.
En lo que respecta a los plazos flexibles y los descuentos en la colegiatura, los padres seguirán pidiendo apoyo financiero a las escuelas
Las escuelas de México y Perú han sido las más flexibles para atender las solicitudes de apoyo financiero de las familias, ya que los cierres de instalaciones continúan y las economías se recuperan a un ritmo lento. Alrededor del 30% de los padres de ambos países declararon que el apoyo financiero relacionado con la colegiatura había sido igual o menor al 10%.
Las escuelas seguirán experimentando dificultades financieras y tendrán que ajustar su estructura de gastos
Las escuelas tendrán que actualizar su modelo de negocio y ajustar su estructura de gastos para mantenerse a flote durante la crisis económica que ha generado el COVID-19. Los padres se volverán más sensibles a los precios a medida que continúe la tensión en sus finanzas. Además, las escuelas tendrán que seguir invirtiendo en sus capacidades tecnológicas y en la formación del profesorado para mantener o mejorar su posicionamiento en el mercado
Los padres priorizarán la tecnología como criterio de selección a la hora de elegir una escuela para sus hijos
En lo que respecta al hardware educativo, la tecnología se está convirtiendo en la norma y las escuelas que la implementen de forma eficiente en sus programas captarán una parte más significativa del mercado. Los padres con hijos en cursos inferiores al 6to. grado son cada vez más conscientes de la importancia de las capacidades tecnológicas como complemento educativo. Más del 60% de los encuestados afirma que las capacidades tecnológicas son ahora un factor fundamental al momento de elegir escuela y casi el 30% dice que ahora las tendrán en cuenta.
Las escuelas tendrán que aplicar medidas de seguridad y sanidad para asegurarse de que los padres se sientan cómodos una vez que las escuelas vuelvan a abrir sus puertas
Los padres tienen sentimientos encontrados cuando los gobiernos empiezan a planificar las fechas de apertura de las escuelas. Las instituciones deben desarrollar protocolos rigurosos con medidas de seguridad y sanidad adecuadas para garantizar que los planteles sean aptos para los alumnos. Más del 60% de los encuestados de Colombia y México afirma que dejarían asistir a sus hijos si se establecen protocolos de seguridad y el 14% de ellos dice que solo deberían volver cuando estén vacunados. Los peruanos son más escépticos respecto al regreso de sus hijos a la escuela pues el 30% de los encuestados afirma que solo dejaría que sus hijos volvieran cuando todos estén vacunados.