Boris Schwartzman

Boris Schwartzman

Líderes Empresariales del Cambio 2021, Premio especial a la Familia Empresaria

Accionista, Miembro del Directorio y Gerente Comercial Miembro de la 3ra Generación, Cía. Industrial Nuevo Mundo

“Más que fabricantes de las mejores telas del mundo, somos educadores y comunicadores por excelencia”.

Cuando le preguntan por el origen de su historia como empresario, Boris Schwartzman brinda una respuesta sencilla, sincera y reveladora: "Yo quería trabajar con mi papá". Su padre fue Lazar Schwartzman Rabinovich, a quien describe como un hombre extraordinario, su mejor amigo, su mentor y su máxima inspiración. De él aprendió los valores y principios que hoy aplica y transmite como líder de Nuevo Mundo, empresa familiar fundada en 1949. 

Antes de ingresar a la compañía, Boris Schwartzman tuvo que superar el primer gran desafío de su trayectoria: sobreponerse a un intento fallido de ingresar a la universidad y a la presión de no estar a la altura de la historia de su familia. Tiempo después, con dedicación logró ingresar en segundo puesto a la Universidad del Pacífico, en una época en la que solo existían 40 vacantes; y continuó luego sus estudios en la Babson College de Estados Unidos, la principal escuela de entrepreneurship de ese país. “Esa experiencia me demostró que tenía la capacidad de lograr lo que me propusiera, pero que las cosas no eran ni iban a ser fáciles. Había que esforzarse”, comenta.

En 1990, con solo 23 años, regresó al Perú para empezar a escribir su propia historia dentro y fuera de Nuevo Mundo, donde en poco tiempo asumió la Gerencia Comercial y de Marketing. Desde el principio comprendió que para alcanzar la excelencia se necesitaba trabajo en equipo, educación y liderazgo; pero que no bastaban los esfuerzos al interior de la empresa. Era necesario ir más allá, llevar esa idea a nivel de país y empezar a transformar el entorno. 

Bajo su liderazgo, Nuevo Mundo ha impulsado diferentes iniciativas para promover la educación y la capacitación de los diferentes actores involucrados en la cadena de producción del sector textil. Destacan entre esos esfuerzos la creación de una escuela de liderazgo al interior de la compañía –desarrollada por su gerencia de Recursos Humanos-, el patrocinio de los estudios de sus propios trabajadores, lograr que la reconocida organización Denim City dicte cursos por primera vez en Perú y la realización anual de la feria Tendencias, el evento más importante del sector textil en el país.

“Somos comunicadores y educadores por excelencia”, dice Boris. Ese ánimo de contribuir al desarrollo nacional se hizo evidente una vez más con la campaña ADN Perú, que Boris creó e impulsó para promover la compra de productos peruanos en plena pandemia de la COVID-19. Hoy, esta iniciativa se ha convertido en un gran movimiento que inspira hermandad nacional, optimismo y esperanza para superar la gran crisis sanitaria y económica. “Soy una persona convencida de que el equipo es mucho más importante que las individualidades”, dice Boris con entusiasmo, y lo demuestra en cada una de sus acciones en beneficio de su empresa, de sus trabajadores y del país.