Sin controles adecuados de registro de transacciones, la información financiera no podría ser confiable para la gerencia al momento de tomar decisiones
Los controles internos son fundamentales para el registro exacto de las transacciones y la preparación de reportes financieros. Sin controles adecuados que aseguren el registro apropiado de transacciones, la información financiera no podría ser confiable y se debilitaría la habilidad de la gerencia para tomar decisiones informadas, así como su credibilidad ante accionistas, autoridades reguladoras y público en general.
Los aspectos más relevantes a identificar son sin duda los criterios en base a los cuales se hará el control interno. Precisamente, el informe de COSO nos ayuda a procesarlo con mayor claridad. Siguiendo sus recomendaciones, los controles internos deben transmitir eficiencia, confiabilidad de la información financiera y cumplir fielmente con leyes y regulaciones.
Los cinco componentes del Control Interno:
- El entorno de control: Revisión del comportamiento, el grado de conciencia y las acciones de la junta directiva, los dueños y otros involucrados en la cúspide de la empresa.
- Evaluación del riesgo: Identificación y análisis de los riesgos relevantes a los que está expuesta la empresa a fin de cumplir sus objetivos.
- Sistemas de información y comunicación: Son las herramientas que permiten identificar e intercambiar información corporativa a fin de que el personal pueda cumplir con sus responsabilidades.
- Actividades de Control: Políticas y procedimientos que deben seguirse y cumplirse a fin de que las instrucciones de gerencia se cumplan.
- Monitoreo: Verificación de la calidad de desempeño.
Cabe indicar que el control interno debe nacer desde la cúspide de la compañía. Sin embargo, debemos tener en cuenta que la estructura eficaz de Control Interno debe ser integral, involucrando al personal de toda la organización e incluyendo a quienes realizan registros contables, preparan y distribuyen políticas, o monitorean sistemas.
Hoy en día, más que nunca, es indispensable conocer y definir un proceso de Control Interno adecuado, a fin de que la empresa esté en capacidad de identificar y prevenir eventuales riesgos para el negocio, generados incluso por sus propias operaciones. La plana gerencial debe preguntarse lo siguiente: