Históricamente, la industria de las Tecnologías de la Información (TI) ha ofrecido nuevas y eficientes formas de mejorar el mundo en el que vivimos; sin embargo, con el inicio de la pandemia a finales del 2019, la manera en que la sociedad funcionaba cambió para siempre: desde los modelos de trabajo, hasta los medios de producción, las cadenas de valor y todo el sistema económico en general. Los sectores productivos han tenido que buscar mecanismos para adaptarse mientras las personas viven bajo cuarentenas intermitentes. Sin duda, la industria de TI ha sido uno de los pilares más fuertes para lograr que los negocios evolucionen a través del desarrollo de nuevas tecnologías para brindar diversas alternativas en todos los aspectos. Son estas soluciones las que se traducen en intangibles que generan valor y que han venido posicionando a las compañías pertenecientes a esta industria como las más grandes y valiosas del mundo.
El cambio en las formas de consumo
La industria TI ha creado nuevas formas de llegar a los consumidores a través de plataformas que permiten a las compañías una rápida expansión a diferentes mercados. Esto a su vez genera y mejora el valor de la experiencia para el usuario, lo que se traduce en retención de nuevos clientes. Adicionalmente, estas alternativas generadas por la industria TI han ayudado a escalar —mediante la automatización y la tecnología— procesos de forma mucho más eficiente para diversas compañías, incrementando su valor. Por ejemplo, mediante estas herramientas se generó un aumento del 60% de las ventas en una empresa de servicios de fabricación debido a la transformación del valor a través de las capacidades transaccionales.
Otro caso es el de una empresa de química, cuyo tiempo de comercialización fue un 50% más rápido debido a un aumento significativo de los ingresos. En otros casos se han generado nuevos ingresos realizados durante los últimos cinco años, gracias a la expansión del canal de ventas directas de las pequeñas y medianas empresas (Pymes).
Estas alternativas traen consigo la convergencia de tres importantes canales de venta digital: Bussines to Consumer (B2C), Bussines to Bussines (B2B) y marketplaces.
Como ejemplo del crecimiento de las compañías que ofrecen este nuevo tipo de soluciones para el consumo, están los sitios de e-commerce y servidores que, de acuerdo con Interbrand en su estudio de 2020 sobre las mejores marcas globales, alcanzaron un crecimiento anual del valor de marca de hasta del 60% respecto del año anterior.
Principales ventajas de las herramientas ofrecidas por la industria de TI
Desde la perspectiva del consumidor, estas nuevas herramientas han ayudado a tener una mayor visión sobre el contenido del producto, la posibilidad de comparar, comprar y pedir. Desde la perspectiva de las compañías, dichas plataformas fueron de gran apoyo para reordenar y tener un mejor mantenimiento de sus cuentas y clientes, mejorar el proceso de producción, incrementar ventas y facilitar sus tareas de logística, entre otras. La experiencia del cliente es la prioridad para todas las marcas, los productos y canales del negocio, gracias a estas alternativas que agregan beneficios tales como una entrega segura, servicios posventa, descuentos y devoluciones, lo que trae consigo que el conocimiento institucional o de marca se esté convirtiendo en un diferenciador.
La Inteligencia Artificial (IA) y el aprendizaje automático, han impulsado experiencias más personalizadas para los consumidores, lo que genera que la configuración, el precio y presupuesto de las transacciones estén más focalizados. Es necesario repensar las ventas y los modelos de compensación, a medida que crece el comercio electrónico mediante ecosistemas abiertos de marketplaces, plataformas y modelos de API (Aplication Program Interface, por sus siglas en inglés), así como las funciones de autoservicio para impulsar la escala y la facilidad de hacer negocios, lo que se traduce en una reinvención de las cadenas de valor, desde la producción y distribución, hasta la venta final.
En las Perspectivas de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) sobre la economía digital 2017, se identifican algunas de las características más destacadas en un conjunto propuesto por ocho vectores de transformación digital en virtud de tres títulos:
1) Escala, alcance y velocidad
2) Propiedad, activos y valor económico
3) Relaciones, mercados y ecosistemas
en donde se logra mejorar la comprensión de lo que se genera con la transformación digital y sus implicaciones.
¿Qué está haciendo EY al respecto?
Estos cambios crean la necesidad de formular un análisis adecuado que identifique quién desarrolla, mejora, mantiene, protege y explota (análisis DEMPE) los intangibles relacionados con las operaciones realizadas por las organizaciones que adaptan estas nuevas soluciones, ya que es importante entender en dónde se localiza la creación de valor para asignar los retornos adecuados a cada actividad, así como alinear los intangibles a la estrategia que cada organización considere acorde a la industria en la que compite; y alinear la compensación que tendrían las diferentes entidades involucradas con la cadena de valor en el grupo multinacional.
En EY México contamos con la experiencia en asesoría en temas de identificación de actividades DEMPE, valuación de intangibles, estimación de precios de mercado en operaciones intercompañía; planeación, estructuración y alineación del modelo operativo, así como apoyo y asesoría en defensa de operaciones intercompañía relacionados con estos análisis. En este sentido, podemos ayudar a las empresas a revisar, planificar e implementar el cumplimiento fiscal en materia de precios de transferencia para así llevar a cabo un correcto alineamiento con las distintas leyes tributarias y regulatorias de cada país.