Según el EY AI Sentiment Index Study, las principales preocupaciones de las personas al utilizar IA están relacionadas con la privacidad, el control y la transparencia que involucra esta tecnología. En ese sentido, el 75% de los encuestados expresó su preocupación por la desinformación generada por la IA, mientras que un 67% teme que esta se vuelva incontrolable sin una debida supervisión humana. Además, un 64% manifestó inquietud por el uso de datos personales sin consentimiento.
Asimismo, el estudio también indica que las aplicaciones que involucran IA más aceptadas a nivel mundial son aquellas que están relacionadas con la experiencia del cliente y la prevención de fraude financiero. Por el contrario, donde hay mayor rechazo es en aquellos aplicativos que reemplazan decisiones humanas de alto riesgo, como en procesos legales o en la contratación de personal. Por ejemplo, el 60% de los encuestados acepta que la IA pueda ayudar a prevenir delitos, pero solo el 45% aprueba que tome decisiones jurídicas y apenas el 37% está abierto a utilizar esta tecnología como profesional médico.
En línea con ello, el estudio destaca que los usuarios se sienten más seguros y receptivos hacia la inteligencia artificial cuando tienen la posibilidad de familiarizarse con ella a su propio ritmo, en entornos confiables y con objetivos bien definidos.